La virtualización de servidores puede ayudar a combatir la dispersión de servidores, hacer un mejor uso de la potencia de cómputo, reducir las facturas de energía y mejorar la agilidad y flexibilidad del centro de datos.
La virtualización de servidores es una de esas tecnologías que es simple en concepto y profunda en su impacto en los centros de datos empresariales.
Esa es la idea detrás de la virtualización de servidores, y la idea se remonta a los mainframes de IBM en la década de 1960 y fue popularizada por VMware, que introdujo el software de virtualización para servidores x86 a principios de la década de 2000. Desde entonces, otros proveedores han desarrollado sus propias plataformas de virtualización de servidores y la industria en su conjunto ha creado herramientas avanzadas de administración, automatización y orquestación que hacen que la implementación, el traslado y la administración de cargas de trabajo de máquinas virtuales (VM) sea algo sencillo.
La virtualización de servidores tomó un dispositivo físico y lo dividió en dos, lo que permite que múltiples sistemas operativos y múltiples aplicaciones desarrolladas aprovechen la potencia informática subyacente.
En la próxima ola de informática, los desarrolladores están dividiendo las aplicaciones en microservicios más pequeños que se ejecutan en contenedores ligeros, y también experimentando con la informática sin servidor (también conocida como función-como-servicio (FaaS).
Beneficios de la virtualización de servidores
¿Recuerdas cuando los administradores del centro de datos tenían que aprovisionar servidores a mano? Con la virtualización de servidores vienen los avances en la automatización que le permiten hacer girar una máquina virtual en segundos y mover múltiples cargas de trabajo con solo tocar un botón en respuesta a las cambiantes necesidades comerciales.
La virtualización de servidores también ofrece alta disponibilidad, failover, velocidad, escalabilidad, agilidad, rendimiento y flexibilidad que requieren las empresas altamente conectadas basadas en la web de hoy en día. Y la virtualización de servidores es la tecnología subyacente que permite a los proveedores de computación en la nube ofrecer sus servicios. Cuando un cliente ordena la infraestructura como servicio (IaaS) de un proveedor de servicios en la nube, comienza con máquinas virtuales y agrega las características de almacenamiento, administración y seguridad asociadas necesarias para llevar a cabo la tarea en cuestión.
Los diferentes tipos de virtualización de servidores
En el mundo de la virtualización de servidores, el servidor físico se conoce como el host y ejecuta un sistema operativo host. Cada VM es un invitado y ejecuta un sistema operativo invitado. Los invitados están divididos el uno del otro.
Con la virtualización estándar basada en hipervisor, el hipervisor o monitor de máquina virtual (VMM) se ubica entre el sistema operativo host y la capa de hardware subyacente, proporcionando los recursos necesarios para los sistemas operativos invitados.
La virtualización de para y la virtualización completa modifican el sistema operativo invitado antes de la instalación en la máquina virtual. Esto mejora el rendimiento ya que el sistema operativo huésped modificado se comunica directamente con el hipervisor, lo que elimina la sobrecarga de la emulación.
La virtualización asistida por hardware también intenta reducir la sobrecarga del hipervisor, pero lo hace a través de extensiones de hardware, en lugar de modificaciones de software.
Con la virtualización a nivel kernel, en lugar de usar un hipervisor, ejecuta una versión separada del kernel de Linux. Esto hace que sea más fácil ejecutar múltiples máquinas virtuales en un solo host, con un controlador de dispositivo utilizado para la comunicación entre el kernel principal de Linux y las máquinas virtuales.
Finalmente, con la virtualización del sistema o sistema operativo puede ejecutar entornos múltiples pero lógicamente distintos en una sola instancia del kernel del sistema operativo. Con la virtualización a nivel de sistema, todas las máquinas virtuales deben compartir la misma copia del sistema operativo, mientras que la virtualización de servidores permite que diferentes máquinas virtuales tengan diferentes sistemas operativos.
Máquinas virtuales vs. contenedores
Los dos principales facilitadores del movimiento de contenedorización son Docker, una herramienta popular para hacer girar los contenedores, y Google Kubernetes, que ayuda a administrar varios contenedores. Los contenedores son entornos autónomos de ejecución de código que comparten el kernel del sistema operativo host.
Los contenedores son más optimizados y livianos que las máquinas virtuales porque evitan los sistemas operativos invitados redundantes y la sobrecarga de inicio asociada. Los desarrolladores pueden ejecutar entre seis y ocho veces más contenedores que máquinas virtuales en el mismo hardware.
Con las máquinas virtuales, puede mover fácilmente cargas de trabajo entre hosts utilizando imágenes de invitado, pero las máquinas de metal desnudo son más difíciles de actualizar o mover. Con servidores bare metal, revertir el estado de una máquina es una tarea desafiante.
Máquinas virtuales vs. informática sin servidor (Serverless)
En un entorno de nube IaaS tradicional, los clientes primero aprovisionan máquinas virtuales, almacenamiento, bases de datos y herramientas de administración y seguridad asociadas, luego cargan aplicaciones en las máquinas virtuales.
Con la informática sin servidor, los desarrolladores escriben código y el proveedor de servicios en la nube maneja todo lo demás. El desarrollador nunca tiene que pensar en servidores, sistemas operativos, aprovisionamiento o administración. Por supuesto, hay un servidor físico que ejecuta el código, pero esa es la responsabilidad del proveedor de servicios en la nube.
En lugar de una aplicación monolítica, el código se divide en funciones específicas. Cuando ocurre un evento que desencadena esa función, el servicio sin servidor, por ejemplo Lambda de Amazon, lo ejecuta. Los proveedores sin servidor cobran a los clientes por la función.
Al igual que con el escenario de microservicio / contenedor, la informática sin servidor pasa por alto la capa de máquina virtual y las funciones se ejecutan en bare metal. En este punto, la informática sin servidor es relativamente inmadura y los casos de uso son limitados.
Futuro de la virtualización de servidores
Mientras que los contenedores están calientes y el interés en la informática sin servidores está creciendo, la realidad es que la virtualización de servidores es una tecnología sólida que impulsa la gran mayoría de las aplicaciones empresariales; algunas estimaciones ponen la saturación de VM hasta en un 90 por ciento.
Es difícil imaginar una empresa que mueva aplicaciones de misión crítica que funcionen sin problemas en máquinas virtuales a contenedores o una plataforma sin servidores. Los usuarios con entornos heterogéneos probablemente aún utilicen VM porque los contenedores necesitan ejecutarse en el mismo sistema operativo y no pueden mezclarse entre Linux y Windows.
Pero para las nuevas aplicaciones que se están construyendo con las últimas metodologías ágiles y DevOps, los desarrolladores ahora tienen opciones. En el futuro, los desarrolladores tomarán decisiones caso por caso sobre si ejecutar nuevas cargas de trabajo en una máquina virtual tradicional, un contenedor o un entorno sin servidor.
Más información: Network World
